Santo Domingo.- El secretario general de la Organización Mundial del Turismo, Zurab Pololikashvili, afirmó este miércoles que la República Dominicana es un ejemplo en el mundo de cómo se puede gestionar el turismo con protocolos responsables en la época del COVID-19, logrando atraer turistas internacionales con seguridad sanitaria.
Como una muestra de confianza en el turismo dominicano, Pololikashvili está vacacionando en el país con su familia, y aprovechó para visitar al presidente Luis Abinader en su último día de descanso.
Tras la conversación con el presidente Abinader en el Palacio Nacional, Pololikashvili, acompañado del ministro de Turismo, David Collado, dijo que el país está preparado para recibir a los turistas con su protocolo sanitario, equipos, seguridad e infraestructura.
Consideró que Abinader es el presidente con unas de las mejores ideas que ha visto en los últimos años para liderar el turismo, atraer más turistas, inversiones, crear nuevos destinos y generar más puestos de trabajo.
“No hay mejor sitio para invertir que este paraíso. Un país legalmente seguro, con un gobierno con motivación a hacer proyectos interesantes, creativos, modernos y sostenibles”, manifestó Pololikashvili.
Felicitó al gobierno dominicano por la manera en que ha gestionado el turismo, tras reconocer que no es fácil mantener un balance entre salud y economía.
Entre las cualidades para elegir a la República Dominicana para sus primeras vacaciones familiares en medio de la pandemia, valoró su historia, cultura, y sobre todo, por la seguridad.
“Hemos visto con nuestros propios ojos que es un país seguro, que cumple todos los protocolos del mundo que hace falta en estas épocas tan raras y difíciles”, agregó el dirigente de la OMT.
En su estadía en el país dijo que gracias a los rigurosos protocolos sanitarios pudo confirmar que es más seguro que estar en la casa o ir a al supermercado.
Además, resaltó la belleza y hospitalidad de la República Dominicana, desde su llegada a Punta Cana.
Entiende que viajar es posible de manera responsable, y que no viajar no es la solución para evitar la pandemia, por lo que exhortó a viajar y disfrutar el mundo.
Hizo hincapié en que en la historia del turismo no existe una crisis tan intensa como la provocada por el COVID-19.
La República Dominicana, por su exitosa experiencia en el manejo del COVID-19, puede servir para la realización de una cumbre de líderes de la región para acoger buenas prácticas que impulsen el turismo.
Acompañaron a Pololikashvil, su hijo Nikoloz Pololikashvili; Bernardo Castillo, asesor del ministro de Transporte de España y George Shamdze.
Espaldarazo
“Que el secretario general de la Organización Mundial del Turismo elija este destino, es un espaldarazo más de que estamos haciendo las cosas diferentes y muy bien”, manifestó el ministro de Turismo.
Collado señaló que el gobierno de Abinader trabaja de la mano con organismos internacionales y con el sector privado, por lo que se ha recuperado la confianza en el turismo.
Dijo que en febrero, que se perfilaba con una baja en la visita de turistas, concluirán con más de 100,000 visitantes, lo que indica que el turismo se levanta de manera firme.
Todas las decisiones tomadas por el gobierno dominicano, agregó, es pensando en el turismo, como la principal industria del país, que representa el 15% del Producto Interno Bruto (PIB).
Asimismo, por la importancia de que unos 500,000 dominicanos y dominicanas viven de esta actividad, y que la crisis ha impactado a toda una cadena que incluye a pequeñas agencias de viajes y tours operadores.
Entre las medidas adoptadas por el país, Collado citó el seguro para cobertura del COVID-19, siendo pionero en esta iniciativa.
Igualmente, el incentivo del turismo interno ha permitido que cerca de 100,000 empleados recuperen sus plazas de trabajo en los diferentes complejos hoteleros del país.
Collado subrayó que en las pruebas aleatorias que se realizan en todos los aeropuerto dominicanos y, en los hoteles, con las pruebas de antígenos para el mercado norteamericano, la tasa de positividad no pasa de 1.20%, por lo que el turismo no representa un riesgo para un aumentar el contagio.