Las remesas que envían los dominicanos residentes en el extranjero se han convertido en el alivio de la economía del país en esta crisis y las autoridades monetarias esperan en 2021. Estos recursos y los que se generen por exportación de oro compensan la divisa dejada de percibir por los bajos flujos de exportaciones minerales y la caída en el dinamismo del turismo.
A pesar de la incidencia de la Covid-19, el comportamiento de las remesas ha superado toda expectativa aumentando exponencialmente su volumen y superando de manera significativa las estadísticas mensuales de años anteriores.
A septiembre, los ingresos por remesas totalizaban US$5,849.8 millones, reflejando un crecimiento sostenido desde mayo de este año con cifras que superan mes por mes el 2019. Según las estadísticas del Banco Central, el dinero que envían los dominicanos residentes en el extranjero muestra un incremento interanual de 37.1%.
En los primeros nueve meses de 2020, a pesar de la crisis económica generada por la pandemia, el volumen de ingresos por remesas aumentó un 10.5% más (US$556.9 millones) de lo que se registraron en igual periodo del pasado año.
El Banco Central dijo que el flujo de divisas de la economía comienza a dar indicios de mejoría con el aumento de las remesas, el reinicio de las actividades de más de 500 empresas de zonas francas con la desescalada, alrededor del 80% del total, y las mayores exportaciones de oro, utilizado como refugio de valor ante la pandemia, con un precio promedio de US$1,629.80 la onza troy durante los primeros cinco meses de 2020.
