El distanciamiento social impuesto como medida de prevención del contagio del coronavirus ha alterado la agenda religiosa de los dominicanos. Actividades tradiciones que cada año congregan a miles de feligreses han sido suspendidas tanto dentro de la iglesia católica como las evangélicas.
Desde principios de mes, el obispo de Higüey, Jesús Castro Marte, anunció que la celebración de la fiesta a Nuestra Señora de la Altagracia, que se lleva a cabo cada 21 de enero en Salvaleón de Higüey, fue suspendida por la pandemia.
En su comunicado anunciando la medida, Castro Marte indicaba que las peregrinaciones, particularmente los días 19, 20 y 21, expondrían a un alto riesgo de contagio debido a la participación masiva de fieles de todo el país. El santuario de la Virgen de la Altagracia, protectora del pueblo dominicano, permanecerá cerrado, aunque los fieles podrán seguir las actividades que se realizan por medios digitales.
Otro evento religioso que suspenden en su forma presencial es la tradicional Batalla de la Fe que realiza cada 1 de enero un grupo de iglesias evangélicas y que concentra a miles de ciudadanos.
El de este 2021 es la versión 58 de la Concentración Evangélica Nacional que en República Dominicana está liderada por el pastor Ezequiel Molina. Conforme explican en la página del evento, la de este año será virtual y tiene como consigna #Supervivientes.
Cada 28 de enero, la iglesia católica realiza la caminata junto a los toros donados al Cristo de los Milagros, en Bayaguana, Monte Plata, y el 1 de enero la Procesión con la imagen del Cristo, en esa misma ciudad. Ambos eventos también fueron suspendidos debido al COVID-19, enfermedad que a la fecha ha causado 2,404 defunciones en el país desde que el 1 de marzo se registró el primer contagio.
Los contagiados hasta la fecha suman 165,035 según el reporte de este 25 de diciembre que emite del Ministerio de Salud Pública.