
El ministro de Educación, Luis Miguel De Camps, respaldó este lunes la propuesta de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) de establecer un pacto nacional por la calidad educativa, al considerar que ese objetivo es una prioridad compartida por todos los actores del sistema.
“Cuando tomamos conocimiento de la propuesta hecha por la ADP en agosto de 2024, que propugna por la calidad educativa, entendimos que era una señal clara de que el país está alineado en ese propósito común”, expresó De Camps durante una entrevista televisiva.
Como parte de esa ruta hacia la mejora, el ministro anunció que el Ministerio de Educación ha retomado el compromiso de implementar la evaluación del desempeño docente, una demanda pendiente tanto del magisterio como de la sociedad. Este instrumento permitirá identificar con precisión las áreas de mejora entre los educadores y, a partir de ahí, reforzar la formación continua y de grado.
“No se trata de señalar, sino de construir capacidades. Si detectamos debilidades en ciertas áreas, giramos a los institutos de formación para que preparen planes concretos para fortalecerlas”, explicó.
Colocación prioritaria de maestros ya evaluados
En otro orden, De Camps anunció que el MINERD ha dado prioridad a los más de 6,400 docentes que aprobaron concursos de oposición en años anteriores y que aún permanecen en el registro de elegibles. “Cuando el Estado llama a concurso, genera expectativas legítimas. Es justo priorizar a quienes ya aprobaron”, sostuvo.
Para facilitar este proceso, se habilitó una plataforma de autopostulación, disponible exclusivamente para esos docentes, quienes podrán aplicar a las plazas disponibles antes de convocar nuevos concursos.
El ministro adelantó que una vez concluido este proceso —previsto para esta misma semana—, se identificarán las vacantes restantes y se procederá a llenar esos puestos con nuevos aspirantes.
De Camps destacó también el papel del Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña (ISFODOSU), cuyos egresados alcanzan un índice de aprobación superior al 95 % en los concursos de oposición, lo cual calificó como “una muestra tangible del impacto positivo del 4 % del PIB invertido en educación”.
Finalmente, el ministro subrayó que en el sistema educativo dominicano “no existen grandes pugnas”, sino una voluntad colectiva de avanzar en la mejora del desempeño, tanto de estudiantes como de docentes. “La ruta hacia una mejor calidad educativa no puede ser unilateral; debe ser participativa, transparente y basada en datos”, concluyó.